El juego que se ocupó de llenar el vacío que tantos años provocó el parón de la saga SimCity.
Tiene un enfoque más realista que la susodicha referencia, con entornos de geografías creíbles y trazados más libres y adaptados al paisaje.
Y aunque es difícil mantenerse a flote econonómicamente, no es tan imposible como para tener al asesor de economía, a la Maxis, todo el rato chillando.
Como contra nombraría la imposibilidad de conectar ciudades de la forma en la cual se podía en el SimCity 4 (se pueden conectar, pero su cercanía no es relevante), y una interfaz algo compleja.
7 de 10
About Cities XL 2011
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